En este, por ahora último viaje, estuve apartado de las rutas del turismo masivo, mi destino era Tel el Amarna, pero tuve ocasión de ver esa parte de Egipto, fuera de la burbuja en que uno ve el país cuando recorre El Nilo entre Assuan y Luxor, en un crucero con barcos de lujo y se hospeda en un gran hotel de muchas estrellas en El Cairo.
Tel el Amarna, como sabeís es la denominación actual de la Ciudad de Atón, donde Akehnaton trasladó su capital lejos de los sacerdotes de Amón. La zona arquelógica no resulta, ni mucho menos, tan espectacular como los templos de la zona anteriormente citada, fue construida de adobes y además, los seguidores de Amón se encargaron de arrasarla. No obstante a los que estamos interesados en la antigua cultura egipcia, resulta muy interesante, aunque fotográficamente poco espectacular. Por ello, aunque muestre mas adelante algún detalle, no quiero dejar de mostrar algunas escnas cotidianas de la vida campesina. En esta, un molino de caña de azucar estrae la pulpa que irá a depositarse en unos calderos para concentrar la melaza,
